En la Cumbre del Futuro de la ONU, celebrada el 22 de septiembre del año pasado, líderes de todo el mundo acordaron el Pacto para el Futuro y sus anexos: el Pacto Digital Mundial (GDC por sus siglas en inglés) y la Declaración sobre las Generaciones Futuras. Se trata de iniciativas que pretenden abordar los desafíos globales del siglo XXI.
En ese marco, la Asamblea General del organismo decidió establecer un Panel Científico Internacional Independiente sobre IA e iniciar un Diálogo Global sobre la Gobernanza de IA. Durante el proceso de consultas, Derechos Digitales ha presentado contribuciones escritas como miembro del Foro Global de Justicia Digital. El pasado 2 de abril, nuestra organización fue invitada como parte de las organizaciones de la sociedad civil a la consulta respecto del Borrador Cero que dictamina el mandato y las modalidades para el establecimiento y funcionamiento tanto del Panel Científico como del Diálogo Mundial.
Nuestra directora de Políticas Públicas, Paloma Lara-Castro, intervino centrándose en tres aspectos importantes relacionados al contenido del Borrador Cero. En primer lugar, llamó la atención sobre el hecho de que los Términos de Referencia publicados son extremadamente generales y carecen de precisión en cuanto a las medidas y procedimientos que deben asegurar y supervisar la independencia política, científica, técnica y financiera del Panel y del Diálogo. En este sentido, Derechos Digitales propuso ampliar la información sobre el diseño de estos mecanismos para garantizar que la independencia de estas iniciativas se mantenga a lo largo del tiempo.
En segundo lugar, Lara-Castro intervino destacando la necesidad de clarificar los procesos de interacción entre el Comité de Expertos, el Consejo Consultivo y otras partes interesadas, establecidos en los Términos de Referencia. En ese sentido, señaló que el término “partes interesadas pertinentes” es ambiguo, ya que no se especifica quién determinará esta pertinencia ni con qué criterios. Además advirtió que, si bien los párrafos 12 y 15 mencionan que el Diálogo Global será “abierto”, sólo otorgan un rol participativo a jefes de Estado y de Gobierno, lo que genera incertidumbre sobre si las organizaciones de sociedad civil podrán intervenir activamente o solo como observadoras. Para ello, solicitó que se proporcione información más detallada sobre dichos procesos para que permitan a las partes interesadas participar no sólo en el Diálogo Global, sino también en los compromisos con el Comité y el Consejo.
Por último, desde Derechos Digitales expresamos nuestra profunda preocupación por la decisión de designar a la ciudad de Nueva York como sede del primer Diálogo Mundial en 2025. Debido al contexto geopolítico actual, la intensificación de las restricciones migratorias en Estados Unidos y la creciente persecución de organizaciones y activistas de la sociedad civil, la representatividad de los actores de la Mayoría Global en este espacio está en riesgo. Por lo tanto, Derechos Digitales propuso que se reconsidere el lugar de sede con el objetivo de que los Diálogos tanto del 2025 como del 2026 se celebren en otras sedes más seguras, como por ejemplo la de Ginebra.
En conclusión, instamos a los Estados miembros a abordar estas lagunas para garantizar que el Panel y el Diálogo estén basados en los derechos humanos, sean significativamente inclusivos y transparentes en su proceso, estén coordinados con otros esfuerzos pertinentes y sean capaces de responder a los riesgos más graves que plantean las tecnologías de IA. Con la trayectoria y experiencia de 20 años en defensa de los derechos fundamentales en línea, desde Derechos Digitales hacemos un llamado a que nuestros aportes sean considerados.